¡Vaya, por fin desde el propio surrealismo alguien dice algo sobre algunas de las últimas imposturas!
Recordemos aquí esta airada nota nuestra, así como los comentarios que hicimos a la foto de la infamia: ¡qué gloria hubiera dado al surrealismo si en vez de apretarle la mano (con las dos, y hasta con sonrisa e inclinación de reverencia) le hubiera saltado al cuello y lo hubiera estrangulado! Pero no, los hechos son tozudos, y el reinado del principio de realidad, eterno.