Un mentecato
que se esconde para sus correos tras la máscara de Alfred Jarry (¡hay que ser
pretencioso!) me escribe: “Eh! T'as pas fini de mêler le surréalisme avec tes
conneries anti-masques?” Por ello, quisiera dejar claro que aquí no se mezcla
nada: es sabida la indiferencia de que el surrealismo ha dado muestra con
respecto a la dictadura sanitaria a lo largo de todo un año, y yo solo me
desahogo como y donde puedo. Al que no le guste, que no abra los archivos, o
que no abra el blog.
Y como no soy rencoroso (y por supuesto sigo en mis trece), le dedico a este polla boba una nueva galería de imágenes:
Y como no soy rencoroso (y por supuesto sigo en mis trece), le dedico a este polla boba una nueva galería de imágenes: