Otra nueva colaboración de Dan Stanciu y Sasha Vlad acaba de aparecer,
ahora en la editorial surrealista de Richard Waara, Rêve à Deux, donde se han
publicado anteriormente obras de Will Alexander, Sotère Torregian, Marie Wilson
con Nanos Valaoritis y Schlechter Duvall.
Sliding ruines se compone de 65 dibujos automáticos de Sasha
Vlad, cada uno de ellos con un texto de Dan Stanciu inspirado por el dibujo.
Como señala Bruno Solarik en el estudio final, “cuando dibuja, Sasha Vlad se
concentra en la libre corriente automática de un inesperado estímulo, mientras
que Dan Stanciu observa la imagen completa en una suerte de hipnosis creativa,
permitiendo así que mensajes enigmáticos y explosivos hablen por sí mismos”. El
ensayista eslovaco diserta tanto sobre las historias de Dan Stanciu –insólitas,
llenas de un humor y una ironía muy peculiares, en una “espontánea y
poéticamente poderosa mixtura de risa y asombro”, por la que irrumpen
personajes como los Reyes del Silencio, los Esclavos del Diálogo, los
Canguros-tomates, los Microcaballos, el Maestro Colibrí, los Imposibles, San
Venda o San Barro, Fixa, Miss Uno y Miss Terminus, etc., etc.– como sobre los
laberínticos dibujos de Sasha Vlad – de quien cita estas palabras: “Si mi
cabeza está vacía de cualquier idea preconcebida acerca de lo que debo dibujar,
entonces es que estoy preparado”, y de ahí la variedad de estos dibujos, en los
que Bruno Solarik ve infinidad de cosas (y que serán diferentes a cada nueva
visión, como serán diferentes para cada “lector”).
Bruno Solarik señala el camino enteramente libre que han seguido tanto el
artista como el escritor, alejándose de toda regla y de todo cliché, tan
habituales en lo que por ahí se hace en nombre del surrealismo.
Este es uno de los grandes libros surrealistas del año 2017, pero otras
colaboraciones entre Dan Stanciu y Sasha Vlad siguen en camino, como otras,
deslumbrantes, ya vieron la luz en años anteriores, concretamente Before/After (52 apariciones transvisuales
generadas por el azar) (1995), Borbro,
Obs, Kabupaten, Feen, Duamaa, Jumah, Ek-Yolo, Serliq, Burcep, Sodhi, Lecade,
Epona, Snijngad, (2005) y Le parasite
de l’azur (2006).