Aunque hace ya tres días que se
clausuró en Bucarest la versión rumana de la exposición de los surrealistas
checos y eslovacos “Other Air”, damos este enlace con algunas de sus imágenes:
http://solarik.rajce.idnes.cz/JINY_VZDUCH_ALT_AER_OTHER_AIR
Bucarest es el lugar ideal para
haberse hecho esta “toma alterna” de la más importante exposición surrealista
de los últimos años, ya que fue una de las grandes capitales del surrealismo en
los años 40 y sigue habiendo en ella actividad surrealista, a diferencia de lo
que ha ocurrido en Belgrado (por no hablar de Bruselas, donde esa actividad ya
tarda más de la cuenta en resurgir). Así, todo un panel fue dedicado a los “parásitos
del azur” de Dan Stanciu y Sasha Vlad, a los que se sumaron seis reproducciones
de las láminas de Before/After. Le parasite de l’azur (Parasitul
azurului/The parasite of the azur), publicado en 2006, es uno de los
más originales libros del surrealismo entre los aparecidos en los últimos
tiempos, pero toda la labor de Dan Stanciu y Sasha Vlad, a la que ya nos hemos
referido varias veces aquí, está llena de una frescura imaginativa absoluta. Aquí
tenemos uno de los “parásitos”, no incluido en el libro:
S. Vlad/D. Stanciu, El trueno del tiempo |
Y aquí uno de los dibujos
automáticos de Sasha Vlad que inspiraron una serie de poemas a Dan Stanciu y
otra a Iulian Tănase, cada serie publicándose independientemente en 2005, con
un título que acumulaba los de cada dibujo: Borbro,
Obs, Kabupaten, Feen, Duamaa, Jumah, Ek-Yolo, Serliq, Burcep, Sodhi, Lecade,
Epona, Snijngad:
S. Vlad, Duamaa |
*
La revista Beaux Arts dedica
un bello número especial a la gran exposición sadiana del Musée d’Orsay, que se
abre con una entrevista a sus organizadores, Annie Le Brun y Laurence des Cars.
Los capítulos se titulan “¿Por
qué Sade es un mito monstruoso?”, “Fin del siglo XVIII. La Revolución libera
las pulsiones destructoras”, “El cuerpo sadiano, delicioso espectáculo de la
crueldad”, “Siglo XIX. Los simbolistas o el elogio de la perversión”, “Siglo
XX. Cuando los surrealistas se inflaman por el divino Marqués” y “Un héroe que
hace fantasear a lo cineastas”, este último por Jacques Zimmer, autor del libro
Sade et le cinéma, publicado en 2010.
Hay pequeños textos dedicados a
Jean-Jacques Lequeu (“arquitecto fallido y artista erotómano”), Felicien Rops
(“el grabador de la decadencia moderna”, que es como él mismo se dio a conocer
en los medios simbolistas) y Max Ernst (viajero a “los bajos fondos del
inconsciente”).