martes, 28 de febrero de 2017

Pierre-André Sauvageot: fotos y fotocollages

Pierre-André Sauvageot, imagen de la película Rue K.

Llamamos la atención sobre otra página que merece conocerse: la de Pierre-André Sauvageot, a quien ya hemos dedicado aquí una nota y a quien frecuentemente aludimos por su participación en las publicaciones colectivas del grupo surrealista de París y por sus frontispicios a las periódicas autoediciones de Guy Girard.
La sección de fotocollages es espléndida, y si algunas de las series ya son conocidas (“La vida secreta de las estatuas”, “París tropical”, “Grandes mareas de equinoccio”, “Breton en China”, “Estatuas y rocas”, “Ciudad y cine”, este último con todas las imágenes de esa joya que es Paris Thèbes), otras son parcial o totalmente novedosas: la de fotocollages inspirados en Los cantos de Maldoror (que saben a poco, deseando que esta serie aumente), la de interiores con animales (asociándolos al mobiliario), las “onirografías” (acompañadas de un texto sobre la práctica collagista, y de divertida visión), los inspirados en El campesino de París y Aniceto o el panorama, “Las máquinas de lo extraño” (con el conocido “Escuchador” y el para mí desconocido “Medidor de acantilados”, cuyas características son definidas en la página), etc.
En la sección de fotos destaca la serie marina y la de visiones femeninas en el bosque. Pero la sorpresa es la conexión establecida con la película que recientemente recomendamos de Jean-Claude Mornard Una aventura de Harry Dickson, ya que hay aquí una serie de fotos para un proyecto de filme realizado sobre Jean Ray y Harry Dickson, además de un conjunto dedicado a la reunión de la Sociedad Sherlock Holmes de Francia en el Tren Azul, estación de Lyon, año 2000.  Unas fotos de Praga también iban dirigidas a un filme, con Prokov Voskovec como protagonista.
La serie fílmica, compuesta sobre todo por documentales sobre figuras de revuelta y artistas del cómic, tiene como plato fuerte “Rue K.”, uno de los mejores cortometrajes surrealistas de estos últimos años.

Pierre-André Sauvageot, Medidor de acantilados

sábado, 25 de febrero de 2017

Richard Misiano-Genovese: “Interiors”

Richard Misiano-Genovese, Ojos

Richard Misiano-Genovese suma y sigue en las publicaciones de La Belle Inutile. Ahora es la vez de una serie de fotomontajes basados en la utilización de rayos X sobre la mano izquierda del artista, y como siempre dejando intervenir al azar.
Interiors, precedido de unas citas de La pequeña anatomía de la imagen de Hans Bellmer, incluye una decena de espectrales imágenes (Ojos, Manzana, Paraguas, Retrato, Juegos de azar, Mano-corazón tarot, Multiplicidad, Naturaleza muerta, Manos y rosa e Hidra) en que Misiano-Genovese no pierde las mañas de inquietar gravemente toda espiritualidad bucólica.

Richard Misiano-Genovese, Juegos de azar

“A Ideia” y el abyeccionismo

Portada de Yves Elléouet, 1965
El número 77-80 de la revista de cultura libertaria A Ideia, con más de 400 páginas, se centra en el abyeccionismo, con motivo del cincuentenario del proyecto de revista Abjecção (1966), frustrado por la presión policial sobre algunos de sus participantes.
Efímero movimiento en que intervinieron algunos surrealistas portugueses, el abyeccionismo es enfocado a fondo por António Cândido Franco en el texto central de este volumen, titulado “Sobre la circunstancia y sobre la ética del abyeccionismo”.
Lo más benévolo que puede decirse del abyeccionismo es que su nombre fue un completo equívoco, ya que el surrealismo es por naturaleza antiabyeccionista. Se supone que la idea era considerar que en una época abyecta (la nuestra, a su manera, no lo es menos) el poeta se ve condenado a la inadaptación social y en consecuencia a ser visto como abyecto, pero a nadie se le escapa que es imposible llamar “abyectos” a un António Maria Lisboa, a un Antonin Artaud, a un Jean-Pierre Duprey o a un Stanislas Rodanski. La fuente del equívoco la apunta el propio António Cândido Franco cuando señala la diferencia entre Luiz Pacheco (padre de familia numerosa que siempre me ha parecido un energúmeno, a pesar de que aquí se lo presente como un ejemplo de “hombre libre”) y por la otra parte Cesariny y Cruzeiro Seixas. Conviene rever el magnífico documental de la exposición “Surrealismo abrangente”, donde Cruzeiro Seixas le cita a Eurico Gonçalves unos versos de Cesariny: “Para frente puxam os bois, para cima puxam os homens”, comentando en seguida que “la idea de la abyección es lo contrario” y que “si una persona quiere provocar la abyección, está falseando alguna cosa”. “No estoy de acuerdo”, afirma contundentemente este artista y poeta a quien no le gustaba nada en el abyeccionismo su aspiración a llegar al máximo de la degradación.
¿Y Cesariny? En 1983 escribe: “Aquí y ahora y siempre en todas partes el surrealismo no tiene nada que ver con el abyeccionismo”, aunque poco después acabe por considerar aquella efímera aventura como una de las “claves” del surrealismo portugués, línea en que lo sigue António Cândido Franco.
El interés de los abyeccionistas por Sade y Bocage forma parte del mismo equívoco. Sade es la antiabyección, y Bocage en todo caso anuncia un fenómeno que sí merece toda estima: la bohemia revolucionaria. Pero esta nunca fue abyecta, sino una respuesta a la abyección, una tendencia ebria de ideal, de signo ascendente, como se ejemplifica en el gran Max Estrella (opuesto además, dentro de la propia bohemia, al sí que abyecto don Latino de Hispalis). Bocage es objeto de muchos trabajos en este número de A Ideia, e incluso hay una interesante encuesta sobre su signo actual.
Hay mucho más material, concerniente parte de él al surrealismo. De nuevo encontramos las trasnochadas críticas situacionistas, en un artículo que se apoya en Vaneigem, el apóstol del viva la tecnología porque con ella no tendremos que trabajar, y del viva el hedonismo juvenil del hago lo que me da la gana. Notable interés, en cambio, ofrecen el reportaje sobre Bruno da Ponte, director de la editorial Minotauro, donde tantas cosas valiosas se publicaron, la evocación de António José Forte por Fernando J. B. Martinho y sobre todo el magnífico ensayo de Maria João Fernandes sobre Raúl Perez, gran artista y gran figura del surrealismo, muy raramente abordado como merece –este es un estudio de referencia. Y hay también cartas a Cruzeiro Seixas de Franklin Rosemont, sobre quien se reproduce la semblanza de Michael Löwy.
En conjunto, otro número sólido, que se suma a los tres anteriores para enriquecer de modo impresionante la bibliografía del surrealismo en Portugal.
Pedidos: Revista A Ideia, Rua Celestino David n.º 13-C, 7005-389 Évora, Portugal.
https://issuu.com/a.directa/docs/a_ideia_2016_2a_parte

miércoles, 22 de febrero de 2017

Ody Saban, “Arte y Libertad”, Realismo surrealista

Ody Saban, Escala en los sueños de los árboles de la noche, 2011

Mañana jueves se inaugura en París una exposición de Ody Saban, que se prolonga hasta el 18 de marzo.
ody invierno 2017

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La exposición parisina del movimiento “Arte y Libertad”, tan impregnado de surrealismo y con la figura central de Georges Henein, viaja a Madrid, donde estará hasta el 28 de mayo. Espero comentar el catálogo cuando me lo traigan unos amigos de esos que todavía son capaces de viajar.

Inji Efflatoun, Composición surrealista, 1942

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Una declaración de Jesús García Rodríguez y Bruno Jacobs, publicada hace unos días en el blog de Peculiar Mormyrid, denuncia los aperturismos y confusionismos surrealistas, en este caso no tan flagrantes como los de Santiago Ribeiro, pero sí suficientes como para haber provocado ya en su día una contundente repulsa por parte de Miguel de Carvalho y algunos de sus amigos, en concreto a una presencia indeseable, que por ahí se empieza. Dado que merece ser conocido, es de lamentar que este texto firmado en el verano de 2016 solo ahora haya aparecido en el citado blog, y que no nos haya llegado noticia de él por ninguna vía en su momento correspondiente.

sábado, 18 de febrero de 2017

Eugenio Castro: los poemas

De Eugenio Castro, la figura más decisiva en la larga trayectoria del Grupo Surrealista de Madrid, pasamos a disponer ya de tres muy notables libros recopilatorios: H, La flor más azul del mundo y ahora El Gran Boscoso... es eso. Aunque la poesía marca su presencia inevitable en los dos anteriores (y también como reflexión sobre el fenómeno poético, nunca reducido en el surrealismo a la escritura), la nueva publicación describe la trayectoria específicamente poética, desde 1980 hasta el presente. Algunos de los títulos que la componen ya son conocidos, al haber aparecido independientemente, en Salamandra o en otros libros, pero también hay nuevos textos.
Edita La Torre Magnética, con excelente maquetación, y la portada lleva una fotografía de Javier Gálvez, con quien Eugenio Castro ha colaborado muchas veces.
Este amplio poemario de un poeta que ha traducido a Ghérasim Luca, Joyce Mansour y Jean-Pierre Duprey, afinidades electivas que hablan por sí solas, abre de la mejor manera las publicaciones surrealistas del año 2017.


Rikki Ducornet: de y sobre

Rikki Ducornet, pintura

Siempre en candelero, Rikki Ducornet publicó en 2016 otra de sus novelas, Brightfellow, poco después de que apareciera un volumen colectivo sobre ella. Este volumen incluye muchos ensayos, dos entrevistas, una bibliografía y algunas imágenes de sus obras plásticas, que pueden verse aún mejor en su página, a la que una vez más remitimos.

Les Coleman, en el iglú del Gran Oso Hormiguero

Les Coleman, dibujo

El último número de Infosurr (125) anuncia la aparición en marzo, dentro de la colección Le Grand Tamanoir, de una edición bilingüe (inglés y francés) de Les Coleman, una de las figuras más vivaces del surrealismo británico. Al cuidado de Michel Remy.