martes, 18 de febrero de 2014

“L’Impromptu”, 12

L’Impromptu llega a su número 12, que celebra con el lema bretoniano “lo maravilloso contra el misterio”. En portada, una reflexión de Pierre Peuchmaurd sobre el poema (que, afirma, todo lo debe al ensueño y a la divagación, y no al sueño), ya que Peuchmaurd está en la más palpitante actualidad, con muchas reediciones, inéditos y traducciones.
Poemas hay de Daniel Giraud, Marcel Miracle, Ghislain Mirkos, Emilio de Santiago (“La bestia del bosque durmiente”), Olivier Hervy (más ráfagas de su “Folletín”), Roberto San Geroteo (“«Viva la vida que ya está perdida»”, así, en español, ya que se trata de la frase que le oyó a un gitano que colgaba sus piernas de un puente del Guadalquivir), Jean-Yves Bériou (“El imperio de la superstición”, una de sus lujosas prosas, en una página que anuncia de él, en las Éditions de L’Escampette, Le monde est un autre), Mauro Placi, Huilo Ruales Hualca (versos extraídos de sus Poèmes noirs, ed. bilingüe) y Ghislain Mirkos. Por desgracia hay también una traducción de un poema del horroroso Rafael Alberti, y encima el de la paloma que se equivocó y por ir al norte se fue al sur, pesadilla con que torturaba a los pobres mortales ya no sé qué sadomasoquista “cantautor” hispánico, allá por mis penitentes e impenitentes años mozos.
Anne-Marie Beeckman diserta bellamente sobre la poesía de Laurent Albarracin, otro de los nombres habituales del umbo, que acaba de publicar en Tolosa Le citron métabolique. Novedad de que nos enteramos es también Prohibidos los sueños prohibidos, de Ludwig Zeller, editado por Mandrágora.

Gilles Montagné, Náufrago voluntario, 1980

Hay collages de Daniel Giraud, Rik Lina (“Birdsong”) y Gilles Montagné (“Náufrago voluntario”), un dibujo de Antonio Ramírez (“Camino a Tar”), una aguada de Ghislain Mirkos (“La gran maquinaria del viento”), una foto de Jean-François Rousseau.
Impactante es el centro de este número 12, ya que contiene un poema en nueve cuadras de Guy Cabanel, inspirado en las imágenes que acaba de exponer Jean-Pierre Paraggio: “Passage d’oiseaux dans le Sud-Ouest”, una de las cuales es “El pájaro de presa, su pico de incendio”, de la que se nos ofrece este detalle:


Por su parte, la hoja séptima de Soapbox, “suspiro del umbo”, presenta como estrella a Jean-Paul Martino (1935-1996), personaje de altos vuelos, seguidor del automatismo “exploréen” de Claude Gavreau, una de las grandes figuras del surrealismo canadiense. Y es que acaba de salir, con collages de Jean-Pierre Paraggio y un postfacio de Richard Walter, su libro Osmonde suivi de Objets de la nuit, que son sus dos únicos textos publicados, y en su juventud. Sonámbula anuncia la edición de los que escribió en inglés: Caravansary (1973), Surrealous (1968) y Elutriation (1982).
Jean-Pierre Paraggio prosigue pues dándonos noticias vitales. A Tenerife nos envía también este Miró enriquecido, acompañado de estas palabras “La sabiduría en Tolosa es el agua del mar por el grifo”.