Esta es una nueva “plaquette” de
Javier Gálvez, quien no pierde el buen hábito de las pequeñas ediciones, tan de
su gusto desde los primeros tiempos de Salamandra. El nuevo cuaderno de Ardemar
ediciones limita su tirada a 14 ejemplares numerados y firmados por el autor, y
prosigue la línea poco complaciente de un automatismo visceral. En
contraportada va una prosa, y en el interior encontramos cuatro poemas que
también pueden leerse como un solo poema. En portada, cómo no, una de sus
fotos.
“Devolved las armonías vocales de
los peldaños ruinosos mientras mezcláis la risa del desesperado al principio
esperanza... Secad los baldíos para que el amor goce de nuevo regando
nuestros rostros con sus fluidos delfines...”