miércoles, 7 de diciembre de 2011

Rik Lina

Rik Lina desarrolla hace algunas décadas una de las obras más audaces del arte contemporáneo, en estrecha colaboración con otros navegantes del bajel surrealista. En 2009 se establece por temporadas junto al tormentoso océano portugués, concretamente en la pequeña población pesquera de Buarcos, protegida por la fascinante Serra da Boa Viagem, con su faro envuelto en la bruma, sus extraños molinos giratorios, sus huellas de dinosaurios y sus árboles renacidos de periódicos incendios.
Pero el periplo portugués de Rik Lina tiene viejas raíces. Ya en 1971, Mário Cesariny y Cruzeiro Seixas, figuras de proa del surrealismo lusitano, organizaban una exposición suya en la Galeria S. Mamede de Lisboa, siempre preocupada por la proyección artística del surrealismo y a la que se deben infinidad de pequeñas publicaciones que hoy son valiosísimas. En 1977 expone en Amsterdam con Cruzeiro Seixas, Raul Perez y el llorado Philip West. Se suceden las exposiciones con el grupo Phases (una de ellas, en 1978, de homenaje a António Maria Lisboa), hasta que, en 1984, su presencia es preceptiva en la gran exposición que Cesariny organizó en el Teatro Ibérico, y que originó un catálogo capital, lleno de textos y con el sello inconfundible del maestro. Esta exposición se tituló “Surrealismo y pintura fantástica”, pero por suerte puede quitársele sin problemas lo de “pintura fantástica” (había además mucho más que pintura, siendo como siempre imposible limitar el surrealismo a un solo medio expresivo).
Es naturalmente como Rik Lina se incorpora en 1994 a las exposiciones y a la colección de la Fundação Cupertino de Miranda (ese milagro acontecido en el norte de Portugal) y desde 2005 a las actividades organizadas por Miguel de Carvalho (otro prodigio que nadie esperaba, de proporciones insospechadas, con una actividad desbordante en la última década, que ha aglutinado a surrealistas de los más dispares y remotos lugares).
Desde 2004, Rik Lina ha participado en unos 20 eventos culturales que han tenido lugar en la geografía portuguesa, algunos verdaderamente detonantes, como las exposiciones de “Surrealismo actual” organizadas por Miguel de Carvalho.
En este otoño, Rik Lina ha realizado dos exposiciones en Portugal. La primera, en las Galerias Amadeo de Souza-Cardoso de Espinho, otra población oceánica del norte portugués, aunque ya cerca de Oporto. Del pequeño catálogo hemos traducido el texto que comenta el muy bello cuadro “Birdsong”, una breve pero densa y esencial declaración del artista sobre su poética y un poema de Miguel de Carvalho inspirado en otro bello cuadro: “Dance Medusa Dance”, escrito en el estudio holandés del artista. La segunda exposición ha tenido lugar en la Galeria Debout sur l’Oeuf del propio Miguel de Carvalho, en Coimbra, a dos pasos del antaño glorioso Zé Manel dos Ossos, cuartel general de mis tiempos conimbricenses. Esta exposición se titula “Leporellos & kakamonos” y también “Exposição Liana”. Las lianas de Lina: homenaje obligatorio a estas plantas inquietantes y fascinantes, por el poeta de las selvas tropicales (y de los arrecifes coralinos).
Actualmente, uno de los hogares más intensos del surrealismo se encuentra en el Cabo Mondego de Portugal, punto extremo de la Serra da Boa Viagem donde está el faro de 1858. Se trata de la Cabo Mondego Section of Portuguese Surrealism, a la que también pertenecen, aparte Rik Lina y Miguel de Carvalho, el poeta João Rasteiro y el artista  Seixas Peixoto, más participantes ocasionales. Si hubiera sentido poético, el faro del Cabo Mondego debería ser la sede permanente de la Section. En tanto, esperemos por las nuevas señales que desde aquel rincón asomado al Atlántico nos puedan llegar.
La pintura de Rik Lina, bella como el crecimiento de las lianas en la noche de los bosques, o como el zigzag súbito de un relámpago en la soledad de los fondos abisales.


Sobre el “Canto de los pájaros” (1999)
Cuando nos encontramos sosegadamente sentados en una floresta elaborando dibujos, oímos y sentimos a los pájaros mucho antes de verlos. Se encuentran escondidos invisiblemente en el follaje, pero si permanecemos quietos en un sitio, vienen a nuestro encuentro, curiosos como siempre, y nos observan. De igual modo, miren mis pinturas y verán los pájaros.
Yo no inventé los pájaros en mis pinturas, sino que súbitamente ellos aparecen, posando entre las pinceladas del follaje. Al instante, desde que se esbozan formas de aves, decido darles énfasis –o apartarlas con pinceladas de la misma forma que un pájaro se posa en el árbol, permanece o huye. Dada la semejanza entre un pájaro y el follaje, el camuflaje y el mimetismo, la distinción se torna difícil. Color, forma y movimiento son las mismas de las hojas, de los ramos y de las flores. Pero sabemos que ellos se encuentran ahí, oímos sus cantos y sus gorjeos. Observamos sus movimientos inquietos y sus vuelos repentinos imitando la vibración de las hojas cuando el viento sopla a través de los árboles.
La imitación continua y la constante metamorfosis de una forma en otra es característica de toda la animación y la inanimación de los seres y criaturas de la selva. Constituyen una gran esfera, esta frontera casi ecológica tangible, existente en todas las florestas tropicales y bancos de selvas coralinas con que nos familiarizamos cuando en ellas nos encontramos sumergidos, dibujando y pintando. Intento expresar la percepción de la dinámica de intercambios entre fenómenos de lo visible y de lo invisible, este contacto especial existente en lo cotidiano entre lo material y lo espiritual.
Rik Lina, Saba, 2005

Cuerpo-liana

Cuerpo-liana toca donde nadie estuvo
desapareciendo en la bruma, más profundo que la existencia

líneas largas conectando todo el ser
paredes verdes estableciendo algo en la invasión continua
sustituyendo palabras por líneas y cuerdas

circundando flores coronadas, respirando la noche
corrientes líquidas de fuego a través del día

ecos de campanas-ecos tocando pinceles en el papel
donde desaparecen nubes

Rik Lina, Saba 2009

“Mi paleta es tropical, toda mi pintura mantiene una relación profunda con la floresta tropical y con los arrecifes coralinos.
Aunque los objetos y los motivos de mi trabajo estén inspirados por la naturaleza, no solo el mundo exterior influencia mi obra. La naturaleza, mi único maestro, dicta mi trabajo, pero también sus hermanos gemelos: el sueño y la imaginación”.


Segmento
Para Rik Lina

um corredor amniótico
sombras na sede tropical com pássaros
árvores dormindo na luz

transeuntes bebendo no seio
o silencio da medusa

o piano ergue-se no oceano para respirar as pétalas da terra quente

um sol liquefeito
um crepúsculo cristalizado
um grito em chamas

no seu atelier, a 18 de janeiro de 2010
Miguel de Carvalho